Existen ya muy pocas cosas en la vida que realmente nos sorprenden, pero en el mundo del high-end la Koetsu Tiger Eye Platinum lo ha hecho. Podemos considerar a esta cápsula como un verdadero killer a la hora de reproducir y que nos es difícil de describir. De repente, después de que ha descendido el brazo de nuestro giradiscos nos hallamos escuchando detalles que no sabíamos o imaginábamos que podrían existir en el interior de esos surcos. La escena sonora y los detalles, la dinámica y el aire alrededor de los instrumentos es nada menos que fantásticamente asombroso. La respuesta en frecuencia parece ser desde DC a la luz. Cualquier otra cápsula que hemos escuchado ahora parece limitada en la respuesta en frecuencia, así como en las microdinámicas y las macrodinámicas.
La primera vez que comenzó a deslizarse la Koetsu Tiger Eye Platinum por el surco nos dijimos sorprendidos: «Nunca antes hemos tenido estas sensaciones«.
Nos dimos cuenta de que no existía ruido de fondo: normalmente cualquier otra cápsula transmite los ruidos mecánicos del surco debido a la vibración de la aguja y del cuerpo; ésta no, tendrá que esforzarse para poder escuchar el sonido más leve a bajo nivel. Nuestra única conclusión es que el cantilever de boro no tiene ninguna flexión y que la cápsula tiene un control de la vibración y la resonancia esencialmente perfecto. Además el sonido es tan neutral y la separación de canales es tan magnífica, que nunca nos hubiéramos creído que esto podría ser posible con una fuente analógica. En pocas palabras, la Koetsu Tiger Eye Platinum se ha convertido en una de las mayores referencias en nuestro sistema comparado con cualquier otro componente front-end que hemos probado.
Tiene su cápsula Koetsu Tiger Eye Platinum en su tienda Werner y también en la tienda online.